Sobreviviendo a la marea

Carande al abrigo de las montañas en la provincia de León

La belleza inmensa de Carande y sus montañas

A veces vamos por el mundo divagando entre un asunto y otro, concretando en serios temas terrenales que nos llenan de preocupaciones y desaliento, y vemos la nieve y el frío como una penalidad, nos aburrimos de la monotonía y la costumbre, y sólo pensamos en lo que echamos de menos, en aquello que nos falta…

A veces nos olvidamos de que no sabemos nada y de que cada día cuenta y nos enseña algo nuevo, y aunque sólo haya sido a seguir viviendo, ya nos ha enseñado algo.

Y resulta que un día alguien te cuenta que existe  un pueblín que la marea que inundó su valle no ha podido inundar, y sigues escuchando sus palabras escritas y descubres que este pueblo tiene un compañero, un amigo fiel y verdadero, que también le acompaña a orillas de un mar que la naturaleza no inventó…

En la belleza inmensa de unas montañas plagadas de vestigios celtas escondidos, en la hermosura preciosa de unos bosques llenos de hayas y tejos, habitados por corzos y ciervos, se encuentra, uno de esos pequeños grandes pueblos que impregnan de vida humana unas montañas elegantes y juguetonas.

Con su hórreo y su tranquila vida montañesa, con sus días de labor y sus tardes de bolos, está Carande, pequeño, discreto, tranquilo y saludable, alejado del estrés y las prisas de la ciudad… y Carande, a pesar de la maravilla de su entorno, se aburriría si no tuviera con quien comentar la jugada, si no tuviera a quien contarle sus cosas, que si hoy nevó, que si Alejandro ha escrito algo más, que si es fin de semana y hoy vienen a vernos desde León… Carande se sentiría solo si no tuviera cerquita a Horcadas, a ese Horcadas que siempre ha estado ahí, como ese hermano con el que a veces te peleas, pero que sigue siendo hermano.

Y así, pasa el tiempo y Carande y Horcadas siguen construyendo su amistad entre sonrisas y lágrimas, mirando con ilusión el futuro, mas recordando con tristeza aquella amarga batalla que ganó el agua contra los hermanos de su valle…

18 respuestas so far »

  1. 1

    patrichueck said,

    Quisiera agradecer a Alejandro Diez González que me haya hecho llegar información de Carande y la preciosa fotografía que ilustra el relato de esta entrada.

  2. 2

    Qué blog tan bien escrito y con tanta sensibilidad. Enhorabuena, es una obra de arte.

  3. 4

    Alejandro said,

    Cuánta ilusión me ha hecho ver a mi pueblín en tu blog!! Las gracias te las doy yo a tí. Como siempre, bien expresado y bien redactado, y por supuesto, un buen reclamo turístico para todos aquellos que no conocen Carande.
    Muchas gracias y a seguir así!!

  4. 6

    abel said,

    Después de visitar bien a fondo este blog, no me queda otra que enlazarlo desde el mío, qué maravilla.

    Por cierto, esto nos cuenta el gran Pablo, sobre las gentes «importantes» y la gente humilde. De esta última se lee mucho en tu blog.

    De nuevo, gracias por compartir tu mágico León.

    http://abelaparicio.blogspot.com/2009/09/benjamin-te-escribe-y-joaquin-te-lee.html

  5. 8

    jvvmsb said,

    Por un momento he sentido una añoranza auténtica, de aquellas que en pocas ocasiones uno se identifica.
    Es una bella descripción.

  6. 9

    Irma said,

    Enhorabuena por tu trabajo, estás creando un espacio muy especial de León y gracias por desprender tanto cariño.

    Besines, Irma.-

  7. 10

    Irma said,

    Te he descubierto de la mano de Chechu y Ricardo Chao en su programa de «hoy por hoy» que están haciendo un trabajo fantástico, sobre blogs vinculados con León.

    Si necesitas alguna foto o alguna cosa que tenga en mi utopía del día a día, sólo tienes que decirmelo, por otra parte no he podido resistirme añadir tu blog, pero no sin antes contar con tu permiso, ya me dirás algo.

    Un abrazo, Irma.-

  8. 12

    Lusu said,

    Desde la lejanía de un expulsado por ese mar que no queríamos, con el corazón encogido ante tus comentarios, Patricia, mi agradecimiento para ti y mi abrazo para los paisanos de Carande y Horcadas. Os llevo en mi corazón. Ojalá que siempre conserves este cariño por la tierra de tu padre y tuya; cuántas veces he oído decir algo cierto y triste a la vez, que desde lejos se aprende a querer y valorar más todo aquello que es nuestro, nuestra tierra, nuestra historia. Bueno, es momento de alegría, ¡¡enhorabuena y adelante!!

    • 13

      patrichueck said,

      La lejanía deja de serlo cuando uno se acerca a aquello que ama, y una vez valorado, se aprende a disfrutar más de ello.

      Disfruta de tus montañas y tus valles, de tus ríos y tus paisajes, porque son de León, y son tuyos…

      ¡Alegría, siempre alegría!

  9. 14

    […] de vez en cuando, conversa con su tropa, se reúne con Vegacerneja, Riaño, Carande y Horcadas, y juntos calibran la fuerza y destreza del enemigo, esperando con paciencia el momento […]

  10. 15

    […] y les dedicas tu tiempo y te dedican el suyo, amigos que aman lo auténtico, lo natural, amigos de Carande y Riaño, amigos de Burón y Boñar, amigos de Valdeón y […]

  11. 16

    […] allá de la belleza de Carande y Riaño, siguiendo camino hacia las alturas impresionantes de la Cordillera Cantábrica, vas […]

  12. 17

    […] allá de la belleza de Carande y Riaño, siguiendo camino hacia las alturas impresionantes de la Cordillera Cantábrica, vas […]

  13. 18

    Arbol milenario said,

    Con las raíces podridas por la podedumbre del agua que nos inundó, desde lejos, os doy las gracias porque me recordáis la tierra de mis antepasados. Vuestros comentarios están llenos de amor por la tierra, y, aunque la imagen que tengo de vosotros es que sois muy jóvenes, envueltos en una sabiduría profunda, de respeto por la tierra y la gente. Aunque estuve allí pocas veces, le tengo un gran cariño a Carande por muy diversos motivos. Riaño vive, adelante amigos.


Comment RSS · TrackBack URI

Deja un comentario