Mi mundo es algo que formamos tú y yo, y algunos más, y nuestras aventuras divertidas, soñadoras, alegres, fantasiosas,…
Mi mundo somos tú y yo, y otros amores, pero tú y yo.
Mi mundo es un lugar donde nuestras cosas son tuyas y mías, y no importa si otros las conocen, o las sospechan, porque al final somos nosotros, nosotras, quienes las sentimos, y vivimos.
Mi mundo es un lugar donde el tiempo no lo marca el reloj, lo marca el cariño y la confianza, donde los atardeceres son eternos, y los sueños, realidades; y hasta las cosas tristes, las soledades y las distancias tienen su parte bonita cuando descubro que no pueden con nosotros, con nosotras, porque como tú no hay nadie, y ni el tiempo ni el olvido pueden con un cariño que guardo en el cofre de mis tesoros.
Mi mundo está lleno de cosas bonitas, ¿no te lo había dicho? Sí, seguro que sí te había contado que recuerdo las veces que nos hemos reído juntos, juntas, los secretos que hemos compartido, y las conversaciones cargadas de tanta intensidad…
Esas conversaciones al otro lado del teléfono en las que tú escuchas mi voz y yo escucho la tuya, a veces como un susurro ahogado por las lágrimas, otras con la emoción ilusionada por cualquier suceso, otras tranquila en la felicidad de la vida cuando no pasa nada, y al final, muchas veces, planeando cuándo volveremos a vernos.
Cariño mío, tú sabes que formas parte de un mundo muy bonito, lleno de flores y nevadas, de estampas cargadas de ensueño, de anocheceres plagados de estrellas, de risas y ocurrencias varias.
Cariño mío, tú sabes que el amor y la amistad son dos caras de la misma moneda, que forman parte de la misma realidad, y si no lo sabes te lo recuerdo: has visto cosas preciosas, hemos vivido experiencias inolvidables y únicas, hemos compartido mucho más de lo que muchos imaginan, y todavía queda tanto por descubrir, por disfrutar, por fotografiar,…
No llores más, no lo hagas: PROHIBIDO.
A partir de ahora sonríe, una nueva etapa empieza hoy: el verano ya está aquí, el calor, la diversión, las fiestas, y las flores, porque aunque el verano llegó, la primavera nunca se va, ¿acaso lo dudas?
Visita el Valle de Valdeón y entenderás de qué te hablo.
IDEM…